martes, 27 de noviembre de 2012

Comentaristas Digitales

“Pero ese pelotudo merecía luego morir”. “Mis profundos y más sinceros pésames a toda la familia del fallecido”. “Toda la culpa es del inútil del dueño del local”. “Seguro que ésta se metió con el jefe para llegar a ese puesto”. “Lo que pasa es que son pobres y entonces ese es su único medio de trabajo”. “Este grupo de música que viene es para pendejitas”. “Y en Paraguay estamos, ¿Qué esperas que hagan?”. Quien lee de manera periódica los diarios digitales sabe perfectamente a que viene ese chocante primer párrafo.


Es el reflejo de nuestra “adorable” sociedad, mostrándose al mundo vía internet. Un ejemplo: ocurre un accidente de tránsito, la noticia es puesta en un portal digital, y automáticamente aparecen los “queridos” comentaristas indicando CON TODA SEGURIDAD quien es el culpable del siniestro. Es impresionante la SEGURIDAD con que se emiten juicios de valor. Por ejemplo, en este caso, podemos encontrar a unos supuestos 30 “peritos expertos en accidentes” entre los comentaristas, juzgando la certeza con que se efectúan las opiniones. Lo simpático es que saben “TODO” solo guiándose de los datos que dio el redactor de la noticia. La ignorancia en su máxima expresión.
"El paraguayito pues piensa que sabe todo". Algo muy curioso es que existen usuarios que se dedican a comentar TODAS las noticias de determinado portal digital. Por ejemplo: entrás a ver una noticia jurídica, está ahí un individuo lanzando su opinión certera (Había sido es un maestro del derecho); entrás a otra, y se compadece de los amigos del fallecido (¿Qué familia se pone a leer los comentarios del accidente donde murió su hijo para ver los “sincerísimos” pésames?); ves una noticia sobre turismo en Paraguay, y está el mismo sujeto CORRIGIENDO la forma en que fue redactado el artículo; leés otra noticia de ciencia, y ahí está el MISMO prójimo, que, a juzgar por sus opiniones, es el futuro Albert Einstein paraguayo.
Veo gente racional que trata sinceramente de hacer entrar en razón a gente como la citada más arriba, pero de forma anticipada puedo decir que son una batalla perdida. Por ejemplo, una vez comenté feliz una noticia (sí, caí también) de determinado grupo de rock que confirmaba su presencia en Paraguay, y no pasaron 10 minutos y ya apareció un fulano discutiéndome que no se compara con Beethoven (En su vida habrá escuchado más allá de la 5º Sinfonía, cosa que incluso dudo). Mi primera reacción fue risa, y más cuando aparecieron otras personas mandándole a la p*** por mí.
Mención Especial a los infaltables Barras Bravas 2.0. No existe noticia importante de fútbol sin leer entre los comentarios “No tenes aguantee, vigilantee” “La vuelta vámo a daaar” “Son todos unos muertooos” “Que se vayan todos, que no quede nadie”. Yo digo que han de pensar seriamente, pero SERIAMENTE que el portal digital es una gradería improvisada donde uno puede alentar e insultar atrás del teclado y su equipo SEGURO va a jugar mejor por eso. En mi opinión estos comentarios en las noticias digitales son un espejo perfecto de la forma en que vivimos y nos comportamos en nuestra comunidad. Y como es internet, lo puede leer cualquier persona del mundo, y justamente es ESO lo que me asusta.
José Palacios
Comunicación UC

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