martes, 5 de agosto de 2014

SOMOS LO QUE COMEMOS

Vivir bien es cuestión de actitud

Por Liliana Portillo
3º Comunicación UC

Comúnmente se prefiere desayunar una rica empanada acompañada de pan o mandioca preferentemente con gaseosa en vez de un saludable té con leche y pan tostado, así es el paraguayo. “La salud de la población es una condición favorable e indispensable para lograr el desarrollo de un país. Una forma de preservar la buena salud es mediante la implementación de una buena dieta”, afirma la Dra. Silvina Martínez López, médica clínica experimentada en emergencia y doctora en nutrición.






Un alto porcentaje de los alimentos que adquirimos no se realiza con criterio de selección, muchas personas prefieren alimentos en mal estado “la fritura como sistema de cocción de alimentos se encuentran muy arraigada”, sostiene la especialista, quien señala que abundan los casos en que las personas tienen conocimiento el mal que padecen, pero no se tratan y tampoco se cuidan, y en esta condiciones no pueden evitar ser sorprendida por derrames, infartos, diabetes, hipertensión arterial y enfermedades respiratorias crónicas que son los más ocurrente en Paraguay.
La mayoría de los paraguayos cometemos errores en la manipulación de los alimentos, echando a perder el 20 a 30% de su valor nutricional, ya sea por cocción insuficiente o sobrecocción, asegura la Dra. Martínez López.
La calidad inicial de los productos alimenticios puede alterarse, contaminarse hasta perderse por mal almacenamiento en lugares indebidos. Además, la mezcla inapropiada de muchos alimentos dificultan la digestión e impiden el máximo aprovechamiento de los nutrientes ingeridos por el organismo, puntualiza la especialista.
“Si el país tomara como rutina los trámites de prevención, sería mucho mejor para todos, en el sentido de que la población tendría menos problemas de salud con ello se ahorraría muchos en los gastos de tratamientos. El paraguayo es poco afecto a la disciplina, aún para cuidar su salud, pero esa práctica debe cambiar” añade.

Actividad física y comida sana
La calidad inicial de los productos alimenticios puede alterarse, contaminarse hasta perderse por mal almacenamiento en lugares indebidos. Además, la mezcla inapropiada de muchos alimentos dificultan la digestión e impiden el máximo aprovechamiento de los nutrientes ingeridos por el organismo afirma la Nutricionista, Lic. Ingrid Poka.
No se tiene en cuenta la limpieza de los alimentos, de las manos, utensilios, cubiertos y la superficie donde se trabaja para su preparación; en tanto que la calidad del agua utilizada no siempre es la mejor, menciona Poka.
-¿Cómo son los hábitos alimenticios en Paraguay?
La gente del interior comen bastante bien comida de la casa con nutrientes y proteínas no como la gente de aquí de la cuidad que comemos muy mala y mucha comida chatarra o lo que podríamos decir comidas rápidas.

-¿Cuáles son las comidas que más se consume por parte de los paraguayos?
Nosotros los paraguayos consumimos mucha mandioca, batata, muchas pastas, arroz, pollo, carne vacuna se utiliza mucho poroto, almidón, harina de maíz y harina de trigo.

-¿Cuál es el valor nutricional de la comidas típicas paraguaya?
Las comidas típicas paraguayas son muy calóricas con mucha grasa y carbohidratos y casi nada de proteínas.

Costumbres y comidas
Esta es una lista de las costumbres y comidas comunes en el país, con los peligros que implican y sugerencias de cómo regular el consumo. Un consejo aplicable a todo alimento en general es simplemente “no abusar”, afirma la profesional. La escasa práctica de actividades físicas engloba a un significativo porcentaje de la población, que se caracteriza por llevar una vida sedentaria; esto lleva a sufrir dolores, aumento de peso, problemas físicos, metabólicos y circulatorios, concluye Poka.

Por qué nos enfermamos
Un alto porcentaje de las enfermedades que sufrimos pueden ser evitadas, ya que son causadas por trastornos o desórdenes  producidos por nuestros malos hábitos alimenticios y la vida irreflexiva que nos lleva prematuramente a padecer enfermedades previsibles añade la nutricionista.
En la dieta diaria de la población paraguaya se registra un bajo consumo de verduras y frutas. Alto nivel de consumo de carne. En la generalidad de los habitantes urbanos el alto consumo de carne roja, vísceras, carne de baja calidad, con huesos y alto contenido de grasas, concluye la especialista.

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